8/2/23

Razones para la salida

Son recurrentes los lamentos sobre la crisis del Catolicismo en Occidente. Estos lamentos suelen proyectarse desde un glorioso tiempo pasado que, a mi modo de ver, a veces se idealiza en exceso. 

En mi experiencia, una iglesia llena no es necesariamente signo de fe. Puede responder a un mero conformismo social, a una tradición asumida de manera acrítica, superficialmente. Muchas de las personas que dejan de ir a Misa habían prescindido de Dios en su vida mucho antes; sólo estaban esperando una razón para dejar de ir. Una razón para la salida está desde luego en el discurso emitido de manera constante por la cultura dominante actual, que se declara antitrascendente y ridiculiza sistemáticamente lo católico. Pero también está en la misma Iglesia: en los contratestimonios de parte de la jerarquía eclesial, y en la incoherencia personal de muchos católicos.