A propósito de Marcos 10, 17-27, dice David Amado en el Magnificat de hoy:
El Señor le ha citado al rico los mandamientos de la segunda tabla, los que tienen que ver con el amor al prójimo, y él afirma que los ha cumplido. Ahora el Señor lo invita a dar un paso más, a cumplir la nueva forma de amar a Dios sobre todas las cosas (primera tabla de la Ley): seguir a Jesús. Pero como el rico ama más a sus bienes, o mejor dicho, se ama más a sí mismo, entonces se aleja: deja al Dios hecho hombre que le pide todo a cambio, especialmente su libertad.