15/3/25

Cuaresma y la primera persona del singular

En parte porque la autonomía y la libertad individual se han constituido como un norte primordial de nuestra sociedad, no es infrecuente la interpretación de la Cuaresma como un "proceso de mejora personal", que puede arrancar de proponerse ciertas "resoluciones cuaresmales" (como las de cada año nuevo). Se trataría, en definitiva, de "probar" nuestra fuerza de voluntad.

Sin embargo, la propuesta cuaresmal, centrada en el ayuno, la limosna y la oración, es más un proceso de encuentro con nuestras debilidades, de toma de conciencia de nuestra naturaleza necesitada de misericordia, de asumir que la santidad a la que hemos sido llamados no puede "conseguirse". Lo que sí está en nuestra mano es permitir a Dios que obre en nosotros e ilumine nuestros pasos.