25/10/09

Contra el eterno desprecio de la Luz

Vivimos en un mundo carente de interioridad. La vida vivida sólo en superficie, sin mirar hacia dentro del corazón, nos convierte en autómatas sin rumbo y acaba por generar un vacío interior que conduce al eterno desprecio de la Luz, de la Verdad, de la propia vida.


Beatriz de Ancos. Tomado de aquí.